Para analizar un posible defecto auditivo es preciso interpretar una audiometría que haya sido tomada con anterioridad. Se entiende por audiometría aquel examen valorativo que hace el médico especialista para medir la función auditiva relativa al tono, equilibrio o intensidad del sonido.
El oído del ser humano está capacitado para la percepción sónica que puede ir desde los 20 hasta los 20.000 hercios. Es decir, recibe bajos y altos decibeles que varían de acuerdo a la intensidad del emisor. Al momento de presentarse cualquier anomalía auricular es necesario realizar los estudios preventivos pertinentes.
¿Cómo interpretar una audiometría? Tipos
Para proceder a interpretar una audiometría es menester que el paciente conozca algunas consideraciones previas que llevan al médico recomendar su realización. La audiometría tiene por finalidad primordial evaluar de una manera exacta, la capacidad que tenga un paciente determinado para escuchar sonidos.
Esta capacidad tiene una variación que se percibe entre el volumen o intensidad del sonido y la vibración de las ondas sonoras. Para que se produzca la sonoridad es pertinente que exista una estimulación entre los nervios ubicados en el oído interno y la onda sonora. Existen 2 tipos de audiometrías. Ellas son:
- Audiometría tonal
Esta prueba tiene por fin determinar la capacidad que pueda tener un paciente para percibir los tonos y la intensidad de los mismos. El especialista se encarga de hacer una medición del sonido más bajo o silencioso, pero en diferentes tonos, para evaluar las condiciones de la persona.
- Audiometría verbal o logoaudiometría
La finalidad de este examen es efectuar una cuantificación de todos los parámetros de reconocimiento a través de la voz y sus sonidos. Está ligado íntimamente al habla de la persona, para de esta manera poder determinar las deficiencias que presenta asociadas a su audición.
Pasos para interpretar una audiometría
El medico tendrá como primera medida interpretar una audiometría para poder dar su diagnóstico ajustado a la patología percibida en el estudio. Una vez tenga en sus manos este examen, el audiometrista dilucidará el tipo de audiometría que presenta el individuo. De acuerdo a los resultados, seguirá los pasos siguientes:
- Audiometría tonal
Para leer una audiometría tonal liminar debe procurarse un estudio profundo de la vía aérea del enfermo. Para esta acción se recomienda que el doctor siga un pequeño protocolo que podría resumirse de la manera como se explica a continuación:
- El examen de la vía aérea debe iniciarse dentro de una cámara o cabina insonorizada.
- Una vez en dicho ambiente, se le colocarán auriculares al paciente para poder conocer cuál es el umbral real de su audición. Es recomendable comenzar e estudio en el oído que presente mayor dificultad.
- En este momento se emiten sonidos que van paseándose por diferentes frecuencias que circunden entre 125 y 8.000 HZ (Hercios).
- Al tratarse de una conducción o examen de la vía aérea los sonidos son percibidos con secuencias de 5 db y de 120 db.
- Es pertinente que antes de concluir el estudio se haga una estimulación de tipo ósea. Para hacer este cambio se requiere quitar los auriculares y colocar un vibrador detrás del lóbulo de la oreja.
El médico hará una lectura de los umbrales de la audición y con esta medición tendrá valores suficientes para conocer la función auditiva del paciente. Acto seguido estimulará las vías aéreas y óseas para verificar la hipoacusia o pérdida del sentido del oído. También revisará el gráfico audiometrico llamado audiograma.
Audiometría verbal o logoaudiometría
En el caso específico de interpretar una audiometría verbal o también denominada logoaudiometría, el especialista médico pronuncia y emite una serie de palabras. Esta actividad tiene por finalidad que el paciente se identifique con aquellas que se pronuncien a diferentes tonalidades y las reconozca.
Estos datos obtenidos son transportados a un gráfico compuestos por dos ejes. En el lado de las ordenadas se ubican el número de palabras que han sido identificadas por el paciente. En la parte de las abscisas, se habrá de colocar la intensidad con la que fueron percibidas por la persona.
Para finalizar, este estudio pasa por tres etapas luego de la ubicación de los datos en el gráfico. Estas fases son:
- El paciente llega al umbral y detecta la palabra pero no llega a reconocer la misma.
- El paciente llega al umbral oye el sonido pero no conoce su significado.
- El paciente llega al umbral conocido de la inteligibilidad, oye y comprende todo.
La audiometría: un estudio necesario
Las deficiencias auditivas requieren un examen previo con el fin de interpretar una audiometría bajo la supervisión estricta de un médico. Es preciso tomar las previsiones del caso para evitar que las molestias se conviertan en una patología de mayores dimensiones.