Varias terapias y el tratamiento de la hipoacusia pueden ayudar con los síntomas de la sordera. La forma en la que se aplique será con base en las causas, el origen y la naturaleza del daño que condujo al problema de audición.
Conocer cómo atender a esta condición es de suma importancia para ayudar a quien lo padezca. En los próximos párrafos aprenderás que tratamientos se ofrecen y están disponibles para los pacientes.
Distintos caminos en la hipoacusia tratamiento
En el camino del tratamiento de la hipoacusia el paciente debe saber que la sordera, como comúnmente se conoce, es clínicamente designada como hipoacusia neurosensorial.
Esta es una condición generada por daños en los nervios auditivos a causa de la perdida de las células ciliadas cocleares; en consecuencia, provoca la desaferenciación de las neuronas del ganglio espiral.
Esto causa problemas auditivos que pueden ir desde leves hasta graves. Aun así, el origen que causa el estado de sordera en un paciente es variable. Junto a otros factores pertinentes el médico sabrá elegir el tratamiento correspondiente. Entre los tratamientos más conocidos se encuentran:
Los tratamientos quirúrgicos
Puede ser necesario someterse a un quirófano para tratar la pérdida auditiva, dependiendo de dónde se produjo la lesión que la provocó. Esto puede ocurrir en casos de:
- Padecer otitis media.
- Otosclerosis.
- En el caso de requerir una timpanosplastia.
- Mastoidectomía para otitis crónica.
También puede ocurrir con la neurinoma de los nervios acústicos, en caso de padecer un tumor que sea benigno.
Los tratamientos farmacológicos
El tratamiento para el nervio auditivo basado en los fármacos va depender del lugar de la lesión que está causando el problema de audición.
- Los antioxidantes pueden ayudar a los pacientes mayores a conservar las células auditivas. Por lo que los preparados vitamínicos, incluidas las vitaminas A y las del complejo B y E, que se utilizan en el tratamiento de la hipoacusia relacionada con la edad.
- Los corticoides son frecuentemente prescritos o administrados intratimpánicamente por un especialista en situaciones de una súbita sordera debido a sus efectos antiinflamatorios e inmunosupresores.
- Para la otosclerosis el tratamiento más frecuente es la administración o medicación prolongada con fluoruro de sodio. Una sustancia inhibidora de la precursora responsable del remodelado óseo, la osteoclástica.
- Si existen vínculos clínicos entre los problemas auditivos y la nasofaríngea, conseguir una respiración saludable con tratamiento enfocado determinará su eficacia para la otitis crónica. Después de resolver los problemas nasofaríngeos, se utilizarán antibióticos para tratar las infecciones del oído medio.
La llamada trompa de Eustaquio tiene por función «oxigenar» el oído medio. Primero debe restaurarse para diagnosticas si la otitis media es causada por esta obstrucción. Para esto, se sugieren antiinflamatorios, corticosteroides y los antihistamínicos.
Tratamientos sin fármacos
Si el diagnóstico no requiere ningún tratamiento farmacéutico, existen otras vías como el uso de las prótesis.
- El uso de audífonos. Su primordial función es amplificar el sonido y tornarlo más audible causando la menor molestia posible en el paciente. Esto debido a que todas las clases de sordera requieren un estímulo más fuerte para ser escuchados.
- Los audífonos están recomendados para casos que van desde hipoacusia leve hasta severa. Hay dos tipos: por vía ósea, con lo cual la señal se amplifica y se envía hacia el oído interno; y por vías aéreas, mediante las cuales la señal se amplifica antes de llegar al conducto auditivo externo.
Por otro lado, están los implantes auditivos, los hay de diferentes tipos para cada problema auditivo.
- Son dispositivos médicos que se pueden implantar total o parcialmente después de una cirugía y están destinados a disminuir la sordera.
- El implante mediante vía ósea está fijado al hueso parietal. Las vibraciones creadas por el microprocesador de sonido se transmiten de forma directa a través de la cavidad craneal hacia el oído interno.
- Un implante coclear es un reemplazo de la cóclea, que transmite impulsos eléctricos dirigidos hacia el nervio auditivo.
Los únicos pacientes a los que se les recomienda un implante coclear son aquellos que tienen una hipoacusia severa o profunda.
Las terapias complementarias para la Hipoacusia
Independientemente del tratamiento que se haya escogido para la hipoacusia del paciente, las terapias complementarias son vitales. Luego de su tratamiento va a requerir:
- Entrenamiento auditivo individual.
- Rehabilitación auditiva.
- Un programa de educación para la comunicación activa.
- Programas de rehabilitación de comunicación grupal.
Ya sean adultos o jóvenes los que padezcan esta condición, todos merecen acudir a un experto calificado en el área para empezar el tratamiento correspondiente y no permitir que se degrade su calidad de vida.