Descubrir que necesitamos usar audífonos puede ser una noticia inesperada y que no queremos recibir. Actualmente los audífonos siguen estando más estigmatizados que las gafas. A pesar de que es una ayuda estupenda para la mejora de la calidad de vida y de ser un dispositivo que te devuelve la audición, uno de los sentidos fundamentales de la vida cotidiana.
Elegir un audífono adaptado a nuestro estilo de vida y necesidades nos permitirá recuperar un alto nivel de capacidad auditiva.
¿Cómo acostumbrarse a los audífonos?
– La pérdida auditiva es individual
La pérdida auditiva es diferente para cada persona, por lo que no debemos comparar nuestra capacidad auditiva con la de los demás.
– La adaptación requiere tiempo
El cerebro debe acostumbrarse a los nuevos sonidos y al funcionamiento del audífono. Los audífonos digitales deben estar programados para garantizar que los niveles de sonido que recibidos son seguros y se procesan a un volumen adecuado para su pérdida auditiva. Tenemos que tomarnos este proceso con paciencia.
– El ajuste correcto es importante
Colocarse el audífono correctamente requiere un poco de práctica y suele ser complicado hacerlo por primera vez. Si una vez dominada la técnica seguimos sintiendo molestias, debemos acudir al audioprotesista para revisar nuestro canal auditivo y comprobar si hay presencia de cera.
Los audífonos pueden provocar picores en el oído al principio, lo que se puede remediar con una limpieza adecuada cada noche. Llevar algo dentro o detrás de la oreja durante períodos prolongados puede ser una sensación extraña al principio. Con el tiempo, nos acostumbraremos a llevarlo.
Si el picor o la molestia persiste, debes acudir a tu audioprotesista, puede darse casos en los que el material podría producir alergia y existen soluciones como las lacas hipoalergénicas que solucionarían este problema. También puede darse el caso en el que la talla del auricular puede que no sea la adecuada y produzca rozaduras.
– Evite las situaciones ruidosas al principio
Nuestro cuerpo necesitará tiempo para adaptarse a escuchar los sonidos al nivel adecuado. Posiblemente, por la pérdida que se sufra se hayan dejado de escuchar algunos sonidos tales como el tráfico, el canto de los pájaros, la televisión…
Al principio es mejor utilizarlo en lugares más tranquilos. Ya que, cuando la persona se encuentra ante todos estos ‘’nuevos sonidos’’ puede sentir fatiga auditiva.
– Redescubrir nuestra propia voz
Descubrir una nueva voz, la nuestra, es posible con el uso de audífonos. Al utilizar un audífono se pierde la resonancia que nuestro cuerpo le da a nuestra propia voz, y esto suele causar sorpresa.
Como ocurre con cualquier enfermedad, es mejor saber lo que se tiene antes de decidir qué hacer. Una consulta con un profesional de la audición puede ayudar a determinar el tipo, la causa y el grado de su pérdida auditiva. Si crees que está perdiendo audición no dudes en contactar con Multiacústica, nuestros expertos audiológicos te realizarán un estudio totalmente gratuito y sin compromiso. ¡No te pierdas más momentos importantes! Cuida tu audición.
Multiacústica expertos audífonos y soluciones auditivas. Mejoramos la comunicación entre personas.