La misofonía es considerada una alteración de carácter neurológico que implica alta sensibilidad a ciertos sonidos cotidianos, no necesariamente elevados. Actualmente, se estima que la razón de su manifestación se halla en el sistema nervioso central y no en los oídos, como se creía anteriormente.
Entre los sonidos referidos cuentan, por ejemplo, mascar chicle, las risas y los silbidos, entre otros. Así, la reacción derivada puede trascender a un simple desagrado, llegando a la ira y agresión. Por ello conviene saber cómo manejarla en caso de manifestarse en nuestro entorno, tal como veremos seguidamente.
Misofonía y sus síntomas
Existe una particular relación misofonía síntomas que puede implicar sentimientos y emociones negativas y perturbadoras. Hablamos de reacciones a los sonidos mediante aspectos precisos, tales como:
- Miedo
- Angustia
- Ansiedad
- Tristeza
- Ira
- Deseos de agredir
- En casos extremos, puede provocar sudoraciones frías, aceleración cardíaca, calambres, hipertensión arterial y más.
No obstante, la respuesta más común entre quienes la padecen es huir de la escena que la genera. Así, normalmente, algunas sensaciones como el asco y la rabia consecuente suelen acompañar al afectado durante algunas horas antes de desaparecer por completo.
Causas principales de aparición
Muchos suelen hacerse preguntas como ¿la misofonía qué es?, misofonía significado o misofonía definición para comprender las causas de su presencia. En ese sentido, bien podemos afirmar que la respuesta para cada una de estas interrogantes es algo ambigua, pero sustentada en estudios científicos de rigor.
Realmente existen dos vertientes al respecto, una de las cuales señala que presenta como razón de ser una realidad multifactorial. Mientras que la otra afirma que tiene su origen en una base neurológica caracterizada por interpretar ciertos estímulos auditivos de manera distinta a la habitual.
La misofonía aún en proceso de estudio
Más allá de lo dicho previamente, en realidad muchos de los detalles inherentes a la misofonía siguen siendo grandes incógnitas para la ciencia. Los estudios al respecto continúan buscando una mayor comprensión sobre las razones de su manifestación.
Aun así, vale la pena referir que la tendencia predominante es afirmar que se trata de un trastorno de tipo neurológico. Este implica una conexión entre la percepción de los sentidos y ciertas sensaciones negativas que la generan.
Misofonía tratamiento
Saber cómo tratar la misofonía resulta extremadamente importante una vez que advertimos su presencia, para así luego poder controlarla. Y aunque no existen hoy fármacos precisos para sanarla, sí pueden realizarse acciones atinentes a su mejoría, tales como:
- Cambios de lugar. Se trata de evitar aquellos sitios en los que se encuentran personas y situaciones que afectan a los misófonos.
- Comunicar la anomalía. Buscar comunicarse con las personas que la generan a fin de lograr su colaboración mediante la empatía puede ayudar.
- Tinnitus Retraining Therapy (TRT). Ayuda a los pacientes a ser más tolerantes con las personas que generan los sonidos molestos.
- Terapia cognitiva conductual. Busca eliminar la asociación de emociones negativas con los sonidos detonantes y controlar progresivamente la ansiedad consecuente.
- Cambios en el estilo de vida. Dormir suficiente, comer adecuadamente, hacer ejercicios y evitar escenarios de sonidos molestos también contribuye en el proceso.
Además de lo señalado, igualmente cuentan la Técnica de Reparto Neuronal, Técnica de Relajación Psicosomática, Neurofeedback y Relajación Muscular Progresiva. Todas estas son de gran utilidad para lograr controlar la manifestación de la misofonía.
Diagnóstico
Comprender la misofonía significado y sus implicaciones clínicas amerita de ciertas pruebas para determinar su presencia y grado de intensidad. En el proceso, juega un gran papel el médico que analiza las reacciones y respuestas físicas del paciente ante ciertos sonidos.
Asimismo, mucho conviene que también lo diagnostique un profesional en el área de psicología humana. Este podrá no solo determinar su presencia en el paciente, sino indicar cuál sería el mejor tratamiento mental para su control y hasta futura superación.
¿Cómo ayudar a un misófono?
Ayudar a una persona que padece misofonía implica conocer antes los detalles de esta anomalía. Y como punto de partida ha de tenerse en cuenta que lo peor a practicar por parte del afectado es el aislamiento. Pues al contrario de la renuncia a la vida social, la clave de su superación radica en el factor comunicación.
Lo mejor es servir como puente de mediación y entendimiento para aquel y quienes lo rodean, buscando despertar un sentimiento de empatía entre todos. En tal sentido, el apoyo de la familia resulta imprescindible, ya que generalmente este es tratado no como un asunto individualm sino justamente como familiar.
Por ello, hacer sentir al afectado que su problema tiene solución es un buen estímulo de sanación, además de que le proporcionará la debida asistencia psicológica. Esto resulta extremadamente importante a la hora de abordar el asunto y lograr una mejor calidad de vida para el paciente.
